Publicamos la memoria de actividades del Programa de Prevención de la Explotación Sexual de la Infancia y la Adolescencia para el ejercicio 2020.

La pandemia de la COVID-19, ha impactado en todos los países del mundo, afectando a las personas, las economías, los sistemas de salud y, en general, a las comunidades en su conjunto. Las diferentes medidas restrictivas impuestas por los diferentes gobiernos en sus respectivos países para hacer frente al virus, han impactado con especial intensidad en las familias y de forma concreta en la infancia y la adolescencia, lo que de hecho supone un factor de vulnerabilidad que pone en riesgo los Derechos de niñas, niños y adolescentes.

Según los últimos datos disponibles proporcionados por el Ministerio del Interior en el año 2019, en España, un total de 40.493 personas menores de edad fueron víctimas de alguna infracción penal. En porcentajes, estas cifras indican que el 3,45% del total de víctimas registradas en 2019 fueron personas menores de edad.

A lo anterior se le debe sumar el aumento de casos que se han detectado durante el período que duró la situación de confinamiento impuesta en nuestro país. De acuerdo con la Fundación ANAR, durante los primeros meses desde el inicio del citado período se atendieron un total de 1.787 peticiones de ayuda a través de sus canales, detectando un incremento de la violencia intrafamiliar contra niñas, niños y adolescentes del 10%, siendo el maltrato físico y el psicológico, seguido de la violencia de género, la negligencia y la desatención o el abuso sexual las tipologías más atendidas.

En este contexto, no sólo hablamos ya de las consecuencias devastadoras de la violencia, sino de otras circunstancias que las agravan aún más, especialmente el hecho de que las personas menores de edad no han podido escapar de la persona agresora y sus posibilidades de pedir ayuda se han visto disminuidas.

Y entre las situaciones de violencia no podemos olvidar aquella relacionada con la explotación sexual de niñas, niños y adolescentes en cualquiera de sus manifestaciones.

Desde FAPMI-ECPAT España llevamos trabajando desde 2011 en el ámbito de la prevención de esta problemática y hemos podidos observar cómo el fenómeno ha ido evolucionando victimizando cada vez a más niñas, niños y adolescentes, también en nuestro país.

Los datos recientes a nivel internacional y nacional han alertado de un aumento significativo de los casos relativos a la explotación sexual de la infancia y la adolescencia,  online de la infancia y la adolescencia. Organizaciones como la nuestra veníamos alertando de las facilidades que ofrecen las tecnologías interactivas para acceder y producir y distribuir material e imágenes de abuso sexual infantil. Lo anterior se ha visto exacerbado, por un lado, por el aumento en el uso de medios digitales por parte de niñas, niños y adolescentes, el mayor tiempo pasado en caso y, por tanto, para el consumo de este tipo de materiales, y, por otro, por la adaptación de los delincuentes sexuales a las nuevas circunstancias.

Los patrones en cuanto a la trata de personas, también es probable que se hayan modificado durante la crisis sanitaria. Es probable que aumente la venta de niñas, niños y adolescentes por parte de sus familias utilizando para ello los medios digitales, así́ como un aumento de los matrimonios infantiles a causa de la crisis económica derivada.

Atendiendo a lo anterior, en 2020, FAPMI-ECPAT España ha continuado con su labor de seguir construyendo un marco de referencia integrador y holístico que, atendiendo a la complejidad de la situación que hemos vivido, garantice el derecho de todos y todas las niñas a ser protegidas contra cualquier forma de explotación sexual.

 

FAPMI-ECPAT España (2021). Memoria de actividades 2020. Resumen ejecutivo

Resumen ejecutivo de la memoria de actividades correspondiente al ejercicio 2020.

FAPMI-ECPAT España (2021). Memoria de actividades 2020

Memoria de actividades correspondiente al ejercicio 2020.